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Multinacionales en Costa Rica apuntan a automatización y tareas de mayor valor agregado
• Medidas se han dado como parte de los reajustes por la pandemia y una mayor virtualidad.
27 de Agosto, 2020.
3M,
McKinsey andamp; Company y
Accenture desarrollan labores diferentes, pero tienen algo en común: todas tienen operaciones en Costa Rica y han ajustado su trabajo de acuerdo con los cambios a causa del COVID-19. En especial, han hecho reajustes con miras de que sus colaboradores generen tareas de mayor valor agregado luego de que la pandemia promoviera un mayor uso de la tecnología y la virtualidad.
Así lo contaron representantes de las tres compañías al participar en la segunda entrega de las series de webinars “Smart Talks” de CINDE, moderado por Judith García-Galiana, vicepresidente de los Centros de Servicio Globales de 3M, y efectuado a inicios de agosto del presente año.
Según Robert Tesoriero, líder de funciones globales y capacidades del cliente de McKinsey andamp; Company, la pandemia generó tres cambios importantes en las operaciones en Costa Rica, uno de ellos: fomentar la automatización en ciertos campos.
“Quitar parte de ese trabajo transaccional, particularmente con los
millenials, los ha liberado y entusiasmado. Hemos invertido en capacitarnos más y mejorar nuestras competencias. El departamento de finanzas y contabilidad es un gran ejemplo en el que mucha gente estaba procesando cuentas por pagar, cuentas por cobrar, informes mensuales, pero ahora todo eso se ha automatizado. Ahora, por ejemplo, están mejorando sus habilidades, invirtiendo en análisis, finanzas e informes contables”, afirma Tesoriero.
Igualmente agrega que el centro de Servicios Comerciales Globales se ha vuelto más estratégico y alineado con el objetivo y la misión de McKinsey de atender a sus clientes. Asimismo, la operación costarricense ha visto una mayor movilidad entre funciones enfocadas a generar carreras profesionales, relacionadas con las competencias de las personas.
Fabricio Soto, Gerente General de
Accenture Costa Rica, explicó que desde el inicio del brote de COIVD-19, trasladaron al 100% de sus empleados a un entorno virtual, trabajando de forma remota desde casa.
Soto afirma: "Aceleramos las habilidades de aprendizaje de nuestro equipo, hemos visto un impacto positivo en términos de productividad, hay menos ausentismo y nos aseguramos de que podamos aumentar y acelerar su ruta de aprendizaje para que salgamos de esto aún más fuertes".
Accenture Costa Rica incluso ha contratado a más de 200 personas durante la pandemia y la gran mayoría ni siquiera ha visitado las oficinas, fueron reclutados virtualmente y firmaron sus contratos utilizando la firma digital.
Mayor flexibilidad. Francisco Maroto, Gerente de RRHH de
3M Global Service Center CR, coincide. La operación costarricense ha continuado el proceso de mejoramiento de habilidades virtualmente y ha buscado formas de trabajar de manera más ágil dentro de sus equipos. Cree que la pandemia permitirá crear un modelo más flexible donde sus colaboradores puedan acudir a la oficina siempre que lo necesiten más allá de un horario rígido.
En una entrevista hecha por
CINDE a Carla Brenes, Directora de Proyectos de
JLL Costa Rica, coincide con esa flexibilidad de parte de los empleadores, pues así lo refleja una encuesta de JLL Global, efectuada en junio pasado: “Las compañías manifiestan un marcado interés por fortalecer aspectos de la experiencia de sus empleados como la colaboración, representado por un 55%, seguido por la flexibilidad y agilidad con un 48%; elementos que se complementan entre oficinas y teletrabajo”.
Por su parte, el estudio reveló que, pese a que los colaboradores valoran favorablemente el teletrabajo, preferirían que la mayoría de sus jornadas laborales fueran en la oficina.
“Algunos aspectos del trabajo en oficina no son fácilmente replicables por tecnologías de comunicaciones, tales como la interacción social, el trabajo colaborativo presencial, mentoring, networking y el monitoreo de metas y objetivos,” explica Brenes.
Francisco Maroto, de 3M, coincide: “La salud mental también necesita de la interacción humana más allá de la virtualidad”. Agrega: “Es importante para nosotros transmitir la confianza, la seguridad, a nuestros colaboradores de que pueden visitar la oficina cuando gusten.”
La Directora de Proyectos de JLL Costa Rica concluye: “La oficina proporciona un espacio para que las personas se reúnan y colaboren, innoven y, en general, establezcan los límites para proporcionar un nuevo impulso para el crecimiento empresarial. Y sin olvidar, para algunos la oficina es un lugar de concentración, manteniendo la vida laboral firmemente lejos de la vida familiar y proporcionando una clara delineación entre los dos.”